sábado, 23 de mayo de 2015

POR QUÉ NO PODEMOS


Ni los datos del paro, ni el número de desahucios realizados en este año, ni el número de empleados perdidos  en sanidad, educación y demás servicios primordiales para nuestro bienestar, ni la cantidad de empresas cerradas, ni siquiera el número de personas sin hogar que deambulan según la “señora” Aguirre por las calles para fastidiar un poco la imagen estética de las mismas y espantar a los turistas, ni el porcentaje de turistas que acuden a nuestro país,nos revelan ni han revelado la verdadera crisis de España.
Los datos reales sobre las crisis los veremos fiel y detalladamente mañana.
El grado de cualquier crisis se mide por su nivel de disposición y de acción cambio. Hablemos de crisis de pareja, de crisis en el trabajo o de crisis existencial. Los cambios, los grandes cambios los damos cuando nuestro nivel de aguante y de resistencia y de malestar llegan a tal punto que no nos queda otro remedio que modificar algo. Uno no deja de fumar por las advertencias que en todos lados le indican que un día probablemente le entrará un cáncer de pulmón (así que pueden ahorrarse todo el dinero que destinan a ello en publidad). No, uno deja de fumar cuando el médico le mira a los ojos y le dice: “o esto (señalando el cigarrillo) o su vida”. Y entonces el miedo y el pánico, en gran parte de las ocasiones hace efecto y genera el cambio. Uno no deja un trabajo cuando se aburre de él o cuando se siente incómodo. Uno deja un trabajo cuando su insatisfacción personal, la angustia y a veces la depresión supera la necesidad de obtener dinero, y las consecuencias que ello implica. Dejamos a nuestras parejas ahogados por los reproches, por los celos, por las mentiras, por las disputas.
Uno, en definitiva, realiza un verdadero cambio cuando no puede casi ni respirar. Y entonces, tira para adelante porque lo que hay que perder es mucho menor que lo hay que ganar, si es que aún queda algo que perder. Y cuando no hay nada que perder, o poco, la valentía se agudiza y se pasa a la acción.
Por eso digo que mañana veremos las verdaderas crisis de España. Y digo bien, LAS: La crisis intelectual, la crisis moral y la crisis económica (entre otras).  Y lo veremos en su disposición al cambio, que en este caso se traduce en hechos tan objetivos como el número de votos y la elección de los partidos a los que van dirigidos.  Grecia es un buen ejemplo de ello. Grecia sí confirmó tener una verdadera crisis( en singular). Grecia demostró, que su elección era el cambio, esto es , que su grado de malestar era de tal grado que no podían seguir así. 
Y hablo en singular, porque a medida que ponían en evidencia una gran crisis, descartaban otras:  intelectual y moral.
Intelectual, porque Grecia aprendió y demostró haber aprendido que para que algo cambie hay que hacer cosas diferentes, que no se puede esperar un cambio haciendo lo mismo todos los días. Y porque hicieron suya la máxima : " la primera vez que me engañes la culpa será tuya, la segunda vez la culpa será mía"
Y moral, porque la votación indica en gran medida el grado de empatía y solidaridad que muestras con la situación del resto de ciudadanos que conviven contigo en tu país y la priorizas a tus intereses personales.
Mañana veremos las verdaderas crisis de España y espero de corazón que este país no muestre esa falta de moralidad y de intelecto que nos suponen la mayoría de los políticos y que desvelarían  que ciertamente estamos en crisis, con S y por qué no podemos.
Hoy estamos en jornada de reflexión, y yo voy a aplicar un consejo que me daba siempre mi madre el día antes de un examen:” lo que no hayas aprendido ya no lo vas a aprender, así que déjalo ya”.

A estas alturas, la moralidad, los valores, la empatía, el raciocinio que requiere el examen de mañana  son competencias demasiado complejas para adquirir de un día a otro. 

2 comentarios:

  1. Extraordinario amiga...en la prensa tenía que estar, en vez de tanta basura. Un abrazo enorme.

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  2. Gracias, Fermi. Eres un cielo. Espero que todo te vaya bien, imagino que estarás como yo estudiando oposiciones,no? ánimo y un abrazote

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